Muchos
de los que me visitais aquí o en 7iete Pulgadas solo
conocéis mi vertiente pop. El 90% de la música sobre la que escribo es
pop
independiente, en cualquiera de sus múltiples ramas, pero la verdad es
que hasta que me consolidé como fan incondicional del indiepop fueron
muchos los grupos y estilos que escuché y algunos de ellos me marcaron
profundamente. La ventaja de tener un hermano mayor con inquietudes
musicales, es que te da la oportunidad de beber de unas fuentes que ya
de
por sí vienen filtradas de mucha morralla que queda en el camino. Desde
que tengo uso de razón me recuerdo con la pletina o el plato encendidos
escuchando discos 'raritos, de los que nadie conoce', o escuchando la
radio o por
supuesto, grabándome alguna cinta. Afortunadamente mi hermano no
escuchaba los 40 principales ni compraba los discos en El Corte Inglés,
por el contrario
tuve la fortuna de que me acostumbrara a escuchar Radio Nacional, Radio
3, a Gonzalo Garrido, Fernando Martín, Rafa Abitbol.... e ir 'de gira' a
comprar discos a Del Sur, Escridiscos, Toni Martin o Record Runner.
Allá por 1984-85 y con 14 o 15 años ya acompañaba a mi hermano de gira
(casi todas las semanas) y casi siempre empezabamos por las tiendas de
importación a ponernos los dientes largos, buscábamos esos discos que
habíamos escuchado en Sin Nicotina o habíamos leido la crítica en el
Ruta 66 y que ansiabamos tener, pero claro, un disco de The Church, The
Rain Parade, Flaming Groovies o REM suponía gastarse unas mil pelas que
por entonces no teníamos, así que la solución pasaba por ir al cuchitril
que tenía por entonces La Metralleta en el edificio de la Gran Vía (en
la planta 5ª o 10ª, no recuerdo) a pillar algún disco de segunda mano
por 350 pelas, quizá cayera en nuestras manos algún 12" de Alaska o el
nuevo de The Cars o un single de China Crisis. Tras pasar por el
Discoplay de los sótanos de la Gran Vía y si la busqueda no había sido
fructuosa, no quedaba más remedio que irnos con las yemas de los dedos
sucias camino del último recurso, la tienda de alquiler de discos. No
recuerdo el nombre, pero sí que estaba por Chueca en una transversal a
Augusto Figueroa y allí podías encontrar todos los discos que habías
visto antes en Record Runner, pero para alquilarlos por 200 o 300 pelas
dependiendo si eran de importación o no. Me río yo ahora de la gente que
le da pereza descargarse música, en aquellos tiempos no tan lejanos, lo
habitual era alquilar un par de 12" (500 pelas), comprar una cinta tdk o
basf de cromo (150 pelas) y grabarlos en nuestra super pletina Kenwood,
disfrutando como enanos de esos 90' escuchando a The Long Ryders,
The Go-Betweens, Hoodoo Gurus o los conciertos piratas de R.E.M.
Y así llego a R.E.M., probablemente la mejor banda de pop-rock de
los últimos 30 años.Ya no existen, no me ha dado pena su separación pues
ya hace años que dejaron de 'llenarme', pero si que me ha entrado un
gusanillo en el estómago y me he puesto sensible recordando los
maravillosos momentos que he pasado escuchando sus discos. Como os digo,
gracias a mi hermano tuve la fortuna de disfrutarlos desde el principio
con su mini lp 'Chronic Town', ¿como no me iba a enamorar de una banda
que me dejó absorto con su 'Gardening at night'? En esos primeros 80
llegó un aluvión de bandas americanas que bajo la etiqueta de Nuevo Rock
Americano inundaron el circuito underground madrileño de camisas de
franela a cuadros, pañuelos azules o rojos y corbatines de búfalo, en el
Ágapo, San Mateo 6, la Vaca Austera.... sonaban Green on Red, The Long
Ryders, The Dream Syndicate, Guadalcanal Diary y por supuesto R.E.M. Al
ritmo de un álbum por año, la banda liderada por Michael Stipe iba
dejando el listón cada vez más alto, primero con 'Murmur', después mi
adorado 'Reckoning' con el que se consagraron como mi banda favorita de
siempre, reconocibles por esas portadas intrigantes, misteriosas y por
que no decirlo, generalmente feas. Incluso en los álbumes más flojos
como 'Fables of Reconstruction', se podía encontrar una joya que te
alegraba la escucha. En 1987 nos enteramos que había un video con los
videoclips de la banda (Succums) y raudos fuimos a la tienda de alquiler a por él,
llevándonos la misma decepción que cuando descubriamos la austeridad de
sus vinilos al comprobar lo misterioso de sus imágenes. Por aquel
entonces no supe apreciar el lado artístico de la banda, y creo que sigo
sin encontrarlo.... Menos mal que todo ello lo suplían con discos que
me sorprendían cada año, en el 86 'Life´s Rich Pageant' me hizo ver el
lado más tierno y delicado del grupo y canciones como 'Fall on Me'
hacían que se me pusiese la carne de gallina. Su discografía iba
alternando momentos explosivos con otros más melódicos, pero sin duda
alguna el momento más apoteósico fue con su temazo 'It's the end of the
world as we know it' de su quinto disco 'Document', una canción que
consiguió que el grupo fuese conocido fuera del circuito independiente y
con el que dieron el paso de IRS a Warner. Para celebrarlo, IRS publicó
un perfecto Lp recopilatorio titulado 'Eponymous' que junto con el
intrigante pero no menos interesante 'Dead Letter Office' (de caras B y versiones) completan la
época dorada de la banda.
Mi hermano y yo que eramos muy radicales con nuestros 'grupos raros'
pensabamos que con el cambio de sello lo mismo se convertían al
mainstream y dejarían de gustarnos, asíque cuando nos enteramos de que
salía a la venta el primer disco de la era Warner ('Green'), fuimos corrriendo a
la tienda (la mítica MF) a por él. La primera impresión al verlo fue de
rechazo y una mueca de desaprobación al ver una portada naranja que nos
descuadraba dentro del intrigante y oscuro mundo de las portadas de REM,
sin embargo al escucharlo en casa respiramos aliviados descubriendo una
colección de canciones que no desmerecían a lo grabado anteriormente.
Bien es cierto que tienen un toque más colorido y festivo, e incluso a
veces bailable como con 'Stand' y 'Orange Crush', pero en conjunto
resulta un trabajo espléndido. Lo que no nos imaginabamos era el
espectacular impacto que tendría su segundo disco de la era 'comercial'
'Out of Time', casi no me dió tiempo a asimilar que a partir de ese
momento REM iban a ser conocidos por TODOS, y cuando digo todos me
refiero a que gracias (o por culpa) de 'Losing my religion', Stipe y
compañía iban a comenzar a sonar en todas las radios comerciales, los
garitos de moda la pondrían e incluso los amigos que hasta ahora solo
compraban discos de Michael Jackson, comprarían el 'Out of Time'.
Todavía recuerdo la primera vez que escuché a REM fuera de mi casa o mi
coche, fue el 'Losing my religion' yendo con mis amigos a una de las
discotecas de moda de la época: Cats, yo no me podía creer ver a toda la
sala bailando y cantando voz en grito la canción de marras. Ni que
decir tiene que le cogí una manía desproporcionada a esa canción
(preciosa por otro lado), pera nada comparado al 'Shiny Happy People',
un tema que no soporto por empalagoso y repelente. Todo eso me llevó a
no comprar nunca ese Lp, un hueco que a día de hoy mantengo en su
discografia, llamadme cabezón o rencoroso, pero nunca he sentido la
necesidad (si la tentación) de hacerlo.
A partir de este momento, ya comenzaba a mirar con recelo cada
nuevo trabajo del grupo, 'Automatic for the People' consiguió que
volviese a acercar posturas con ellos, recuperaron el espíritu bucólico y
sentimental que tan bien se les da y firmaron lo que ha sido su mejor
disco en la etapa Warner. Pero todo se vino al traste con la publicación
de 'Monster' en 1994, probablemente su peor Lp de siempre, basta decir
que la mejor canción de ese disco es la discreta 'Where's the frequency,
Kenneth'. Curiosamente y para mi desgracia, después de 10 años
esperando, REM vino por fin de gira por España en 1995 presentando su
peor disco. No se puede decir que fuese desganado al concierto al
Palacio de los Deportes, pero si escéptico, no me imaginaba un concierto
'recopilatorio' de su carrera y así sucedió ya que repasaron
principalmente sus 4 últimos trabajos dejando de lado su etapa IRS. Me
tuve que contentar con escuchar el 'So. Central Rain' y el apoteósico final con
'It's the end of the world', poca recompensa para lo que podría haber
sido el mejor concierto de mi vida.
De aquí en adelante, no tengo mucho que comentar, seguí en la
distancia la evolución de la banda, la salida del batería Bill Berry del
grupo, la publicacion de discos discretos como 'Up' o 'Reveal', la fama
en descenso...., solo con la publicación en 2003 del 2CD recopilatorio
'In Time' volvieron a disfrutar de portadas en las revistas, sobre todo gracias a la
gran canción 'Bad day', un espejismo que desapareció en sucesivos
discos hasta que el mes pasado decidieron (acertadamente) poner fin a
una aventura que ni ellos mismos habrían soñado cuando en 1980
comenzaron a tocar juntos en la universidad.
Hasta siempre REM.
Top ¿ten? en orden alfabético
- Bad Day (2003 - In Time)
- Bandwagon (1987 - Dead Letter Office)
- (Don't go back to) Rockville (1984 - Reckoning)
- Driver 8 (1985 - Fables of Reconstruction)
- Fall on me (1986 - Life's Rich Pageant)
- Gardening at Night (1982 - Chronic Town)
- Green Grow the Rushes (1985 - Fables of Reconstruction)
- Harborcoat (1984 - Reckoning)
- I believe (1986 - Life's Rich Pageant)
- It's the end of the world as we know it (and i feel fine) (1987 - Document)
- Man on the Moon (1992 - Automatic for the People)
- Radio Free Europe (1983 - Murmur)
- Shaking Through (1983 - Murmur)
- So. Central Rain (1984 - Reckoning)
- Stand (1988 - Green)
- The Flowers of Guatemala (1986 - Life's Rich Pageant)
- The Sidewinder Sleeps Tonite (1992 - Automatic for the People)
- Talk About the Passion (1983 - Murmur)
- World leader pretend (1988 - Green)